Devolver un coche de leasing: diferencias entre daños y uso habitual
El leasing de vehículos, ya sea para uso particular o profesional, ha ganado una gran popularidad en los últimos años. Sin embargo, uno de los momentos más conflictivos suele ser la devolución del coche al finalizar el contrato. Las discrepancias entre arrendador y arrendatario son comunes. En estos casos, contar con terceros neutrales como DEKRA puede evitar disputas y ofrecer garantías para ambas partes.
¿Daños reales o exigencias excesivas?
Un usuario enfadado relata en un foro su experiencia tras devolver su coche de leasing. El concesionario le ha cobrado 1.456,89 euros netos por una abolladura “mínima” en el parachoques trasero, apenas perceptible a simple vista. Según él, el vehículo estaba en un estado muy superior a la media. Pero la versión del arrendador es muy distinta: el parachoques debe reemplazarse y repintarse completamente, ya que los sistemas de asistencia integrados no permiten una reparación parcial o “smart repair”.
¿Qué se considera desgaste normal en un coche de renting?
Michael Tziatzios, responsable de gestión de vehículos usados en DEKRA Automobil GmbH, conoce bien este tipo de situaciones. “Al final del contrato de leasing surgen muchos desacuerdos sobre la pérdida de valor del vehículo durante su uso”, comenta.
Uno de los puntos clave es diferenciar entre:
- Desgaste normal, ya incluido en las cuotas del leasing.
- Daños que reducen el valor residual del coche y que, por tanto, deben ser abonados por el arrendatario.
El problema se agrava cuando los criterios de evaluación no están claramente definidos. “Los catálogos de daños del leasing suelen ofrecer solo ejemplos, lo que complica la valoración real del estado del vehículo para una persona sin conocimientos técnicos”, señala Tziatzios. Por ello, establecer criterios objetivos es esencial para evitar conflictos.
Catálogo de daños DEKRA: evaluación clara y justa
Para aportar transparencia, DEKRA ha desarrollado un catálogo de daños detallado de casi 30 páginas, con numerosos ejemplos fotográficos. Este documento permite valorar de forma precisa:
• Desperfectos visibles.
• Signos normales de uso.
• Daños que afectan al valor residual.
“Este catálogo ofrece una base de evaluación uniforme tanto para leasing de uso particular como empresarial”, destaca el experto.
Además, es posible que la inspección final del vehículo se realice según un catálogo de daños específico del cliente, siempre y cuando haya sido acordado desde el inicio del contrato y esté accesible para ambas partes.
A la hora de clasificar el estado del vehículo según los criterios establecidos en el catálogo, los expertos de DEKRA se apoyan en sus conocimientos técnicos y su alta cualificación. “Cada uno de nuestros peritos ha recibido una formación básica exhaustiva”, explica Tziatzios. “Además, están obligados a realizar formaciones internas anuales. En DEKRA apostamos por la seguridad y la objetividad, y eso es algo que nuestros profesionales aplican en cada inspección.”
Inspección del vehículo antes de su devolución: ¿cuándo conviene?
¿Tiene sentido solicitar un
informe de estado del vehículo
antes de devolver el coche de renting? Según Tziatzios, depende del estado del vehículo. Si no presenta defectos visibles, no suele ser necesario. Sin embargo, si existen daños y el arrendatario duda sobre su aceptación por parte del arrendador, un informe preliminar puede ser muy útil. Este informe también ayuda a decidir:
• Si compensa reparar el vehículo antes de entregarlo.
• O si es mejor asumir la depreciación con el informe en mano.
Atención a los accesorios: evitar costes ocultos
Los costes adicionales en una devolución de leasing no solo se derivan de golpes o arañazos. También es fundamental comprobar que el coche se entrega con todo el equipamiento original. “Piezas perdidas pueden acarrear costes elevados. Por ejemplo, si se pierde una llave, puede ser necesario cambiar todo el sistema de cierre”, advierte Tziatzios.
Con DEKRA es posible solicitar un informe técnico antes de devolver el coche de renting. Este informe incluye:
- Revisión visual del interior, maletero, motor y carrocería.
- Inspección del chasis y funciones del equipamiento.
- Prueba de conducción breve.
- Valoración del estado con indicación de la pérdida de valor.