Planes de Movilidad: una nueva obligación para las empresas

07 oct 2025 Sostenibilidad / Movilidad

Fomentar desplazamientos más sostenibles y reducir el impacto ambiental

Desde el pasado 10 de agosto, las empresas de mayor tamaño están obligadas a contar con un Plan de Desplazamiento de Empresa (PDE) o Plan de Movilidad Sostenible (PMS). Esta medida, recogida en el Decreto 132/2024 en Cataluña y alineada con los objetivos nacionales y europeos de sostenibilidad, busca reducir el impacto ambiental de los desplazamientos laborales y fomentar una movilidad más eficiente, segura y saludable.

Un paso más hacia la movilidad sostenible

El transporte representa una parte importante de las emisiones de gases de efecto invernadero. En el caso de los desplazamientos diarios de los trabajadores, el uso mayoritario del vehículo privado contribuye no solo a la contaminación, sino también a la congestión urbana y al estrés asociado a los atascos.
Los planes de movilidad pretenden revertir esta tendencia mediante la promoción del transporte colectivo, los desplazamientos compartidos y el uso de medios activos como la bicicleta o los trayectos a pie, siempre que sea posible.
Más allá del cumplimiento normativo, esta obligación se enmarca en una estrategia global para avanzar hacia una movilidad baja en emisiones y una planificación urbana más sostenible.

¿A quién afecta esta obligación?

Las empresas que deben elaborar un PDE o PMS son aquellas que:
  • Cuentan con más de 500 trabajadores (propios o externos) en un mismo centro de trabajo.
  • Tienen más de 250 trabajadores por turno.
  • O se encuentran en zonas con problemas de calidad del aire, según el Real Decreto 102/2011, con más de 200 trabajadores.
Estas organizaciones deberán analizar los desplazamientos generados por su actividad, proponer medidas que reduzcan el uso del vehículo privado y establecer indicadores de seguimiento para evaluar periódicamente la eficacia del plan.

Contenido básico de un plan de movilidad

Un Plan de Movilidad Sostenible incluye habitualmente:
  1. Diagnóstico de la situación actual: estudio de los patrones de movilidad de los trabajadores, medios utilizados, horarios y principales puntos de origen y destino.
  2. Diseño de medidas: conjunto de actuaciones para promover el transporte público, la bicicleta, el teletrabajo o el coche compartido, entre otras opciones.
  3. Implantación y comunicación: participación activa del personal y campañas internas para fomentar nuevas pautas de movilidad.
  4. Seguimiento y revisión periódica: evaluación bianual mediante indicadores de cumplimiento y propuestas de mejora continua.

Beneficios para las empresas y los trabajadores

Aunque la normativa marca una obligación, los planes de movilidad representan una oportunidad para las empresas. Entre los principales beneficios destacan:
  • Reducción de costes operativos derivados del transporte y del uso del aparcamiento.
  • Mejora de la salud y bienestar de los empleados al promover modos de transporte más activos y menos estresantes.
  • Incremento de la productividad, al reducir tiempos de desplazamiento y mejorar la puntualidad.
  • Refuerzo de la imagen corporativa y la reputación medioambiental, factores cada vez más valorados por clientes, inversores y empleados.
  • Contribución a los objetivos ESG y de responsabilidad social corporativa (RSC).

Un compromiso compartido

La movilidad sostenible requiere la implicación de todos los actores: administraciones, empresas y trabajadores. Las compañías, en particular, desempeñan un papel clave al facilitar alternativas y concienciar a su plantilla sobre la importancia de un desplazamiento responsable.
La normativa no solo pretende imponer un requisito, sino impulsar un cambio cultural en la manera de movernos hacia el trabajo.
Apoyo técnico especializado
Para facilitar el cumplimiento de esta obligación, en DEKRA ofrecemos acompañamiento técnico en el diagnóstico, diseño y seguimiento de los planes de movilidad, ayudando a las empresas a integrar soluciones sostenibles adaptadas a su realidad operativa.